Acorralado
Aprovechando el espectacular boom mediático que vive la literatura nórdica en estos tiempos, y en concreto el thriller, empujada claramente por el fenómeno que ha supuesto la saga “Millenium” de Stieg Larsson en todo el mundo, nos llega una nueva adaptación de una novela: “Headhunters”, escrita por Jo Nesbo que está siendo todo un éxito de ventas internacional.
El director noruego Morten Tyldum que ya había dirigido “Buddy” y “Varg Veum - Ángeles Caídos”, toma el mando para dirigir esta adaptación homónima para el cine, que se podría decir tiene todo lo que una película de este género necesita para gustar.
Roger Brown (Aksel Hennie) es un cazatalentos sin aparentes escrúpulos y con una vida casi perfecta, si no fuese porque vive ligeramente por encima de sus posibilidades intentando complacer a su explosiva e inteligente mujer Diana (Synnøve Macody Lund). Debido a esta carencia de ingresos necesarios no le queda otra que dedicarse al robo de obras de arte en lo que parece ser su verdadera especialidad y vocación. Como es de esperar, y a pesar de tenerlo todo aparentemente controlado, la historia se complica cuando se interpone en su camino alguien con muchísima ambición y menos escrúpulos que él, Clas Greve (Nikolaj Coster-Waldau). A partir de este momento la película toma un giro de ciento ochenta grados que el espectador agradece, y comienza una persecución brutal que nos retrotrae inevitablemente a la legendaria “Acorralado” de Ted Kotcheff con un Rambo un poquito más yuppi que el de aquella ocasión.
La película cuenta con la dosis de acción necesaria para mantener un buen e intenso ritmo en sintonía con un guión que en ningún momento se deja llevar por la sencillez sino que continuamente se encuentra en la búsqueda constante de la sorpresa. Este buen ritmo se ve favorecido por unas interpretaciones que se ajustan a lo que Tyldum pretende además de una sobria fotografía a cargo de John Andreas Andersen, que permiten aportar la credibilidad necesaria para que la historia no se desvirtúe en delirios narrativos innecesarios ni en estructuras demasiado complejas.
Quizás es en el desenlace final donde “Headhunters” flojee un poco, en sus aspectos más esenciales (aunque nos depare alguna que otra sorpresa) pretendiendo encajar diversas piezas de difícil construcción para completar un puzzle sin apenas manchas y con pocas cuestiones abiertas.
Con todo, es una excelente ocasión para disfrutar de un cine (el noruego) poco habitual a presentarse en las taquillas españolas, y de un género (el thriller) muchas veces maltratado y que en esta ocasión se nos presenta con elegancia y estilo.
sergio_roma00@yahoo.es
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